Una imagen vale más que mil palabras
El refranero, compendio de sabidurÃa popular, reza: “una imagen vale más que mil palabrasâ€
Este post y los siguientes son una reflexión a partir de una imagen, en este caso una imagen generará muchas más que mil palabras.
El doctor Paul Richer en su libro “AnatomÃa artÃstica del cuerpo humanoâ€, segundo volumen “La mujer†incluye en la plancha número doce una ilustración, que representa la silueta de un hombre y, sobrepuesto a éste, la imagen correspondiente a una mujer de igual caja torácica.
Richer presenta esta plancha para explicar los tejidos adiposos que recubren el cuerpo de la mujer, y la comparación con los del hombre.
A nosotros nos da la posibilidad de analizar sobre una misma estructura ósea las variaciones de los perÃmetros de pecho del hombre y de la mujer
Paul Marie Louis Pierre Richer, conocido como Paul Richer (1849-1933) fue un gran anatomista, neurólogo, historiador de la medicina, ilustrador y escultor francés. Debido a su don para la observación y el dibujo a partir de un modelo vivo y a su bagaje en medicina, se convirtió muy pronto como uno de los mejores dibujantes e ilustradores de anatomÃa humana de su época. Ocupó la cátedra de anatomÃa artÃstica en el Escuela de Bellas Artes de ParÃs (1903)
La doble silueta aparece en la plancha entera original. Muestra una serie de lÃneas que indican las secciones en diferentes niveles. En la parte derecha de la imagen presenta las varias secciones
Hemos reproducido la primera de las secciones de esta silueta de hombre-mujer que corresponde a la sección del contorno de pecho.
En la parte interior observamos la espina dorsal y la caja torácica (marcada esta última con lÃnea discontinua).
El área de color negro excéntrica a la primera, representa la capa adiposa del cuerpo masculino.
La silueta más exterior representada con un trazo fino de lÃnea continua es el contorno de la silueta de la mujer.
Hemos digitalizado la imagen para poder incluir nuevos elementos o sacar trazados del original y marcado con una lÃnea discontinua (._.) el eje sagital de la sección que en la sección original no existe.
Esta imagen es interesante para analizar muchos de los procedimientos que se utilizan para realizar patrones y poner en discusión principios dados por ciertos en el mundo del estilismo e incluso en el sistema de la comercialización de las prendas acabadas de confección.
La prenda unisex ajustada
En la actualidad han proliferado una serie de marcas que pretenden uniformizar las tallas y hacer prendas que sirvan tanto al hombre como a la mujer, las llamadas prendas unisex.
El sector de la moda es una industria y como tal busca beneficios.
Para incrementar las ventas intenta incluir en sus colecciones una serie de tendencias, no sólo de colores y formas sino incluso conceptos de filosofÃa. Cambiando continuamente formas, colores y estilos renueva los armarios de la gente.
A veces, intentando hacer lo propio y justo, se meten en camisas de once varas. Las prendas unisex responden al concepto feminista justo y loable de equiparación de los sexos: el hombre y la mujer deben tener en sus vestidos la misma funcionalidad y comodidad.
La funcionalidad de las prendas tiene que ver mucho con la capacidad de movimiento que se traduce en confort. Las prendas no pueden ser demasiado holgadas ni demasiado estrechas. Deben ser suficientemente anchas para permitir los desarrollos de las articulaciones y suficientemente estrechas para no dificultar los movimientos.
La silueta exterior que delimita el cuerpo de la mujer y la interior que delimita el del hombre son diferentes. Aristóteles dijo, hace unos cuantos años, que se debe dar “un trato igual a los iguales y desigual a los desigualesâ€, de ende, el cuerpo de la mujer al ser diferente que el del hombre debe tratarse de forma diferente.
Esta diferencia entre los cuerpo tiene como consecuencia que las prendas superiores unisex propiamente dichas (que se utilice la misma prenda fÃsica para ambos sexos) sólo pueden ser anchas y por lo tanto poco funcionales en la mayorÃa de los casos.
Una prenda superior entallada deberá seguir la forma del cuerpo que viste: si sirve para el hombre, no servirá para la mujer y viceversa.
Podemos crear una prenda superior entallada idéntica para ambos sexos, con la misma holgura y las mismas transformaciones a partir de las respectivas bases. Al ser las bases diferentes porque recubren cuerpo diferentes generarán patrones completamente diversos para que sean iguales y con la misma funcionalidad, trato de los iguales de forma igual y de los desiguales de forma desigual.
Las prendas resultantes no son prendas unisex con tallas comunes para ambos sexos, serán prendas diferentes, con tallas diferentes y el mismo exacto estilismo basado en el concepto de identificación de los dos sexos.
Si os interesa el tema de la realización de un vestido unisex podéis encontrar en la Web los estudios de la NASA que se hicieron para crear un traje espacial unisex.
Las prendas superiores unisex ajustadas realizadas en tejido elástico deberán utilizar la elasticidad para cubrir las diferencias de los anchos entre ambos cuerpo. Si nos conformamos con una malla, más abierta en según qué zonas y holgada (por lo tanto arrugada) en otras, podemos admitir este tipo de prendas como unisex. El tejido elástico se debe utilizar para dar comodidad y debe tener la misma holgura (positiva o negativa) en toda la superficie del cuerpo que cubre (o al menos debe tender a ello): utilizando la elasticidad para los desarrollos de las articulaciones. El aplicar las propiedades de la elasticidad para cubrir cuerpos con volúmenes diferentes es una chapuza.
Comercialmente serÃa muy interesante reducir el Stock de tallas y de prendas realizando sólo una única colección unisex, también lo serÃa encontrar la piedra filosofal, vivir en paz, ser felices o vivir eternamente joven. Sin embargo hay muchas cosas que no existen en este mundo.
La primera conclusión es que las prendas superiores ajustadas unisex no existen en sentido estricto a no ser que sean muy holguradas.
BibliografÃa:
Nouvelle anatomie artistique du corps humain, II cours supérieur. morphologie. La femme. Dr Paul Richer. Librairie Plon.
